Un hombre y una mujer murieron al caer en un pozo de agua en la gasolinera de la Central de Abasto, ubicada a orillas de la carretera Iguala-Taxco, en la periferia de esta ciudad.
Estos hechos ocurrieron hacia las 06:00 horas en dicho punto de la periferia, hasta donde se movilizaron los cuerpos de rescate y personal policial.
Los primeros reportes indican que la empleada de la gasolinera intentó abrir una llave para abastecer de agua a las instalaciones, pero accidentalmente cayó en el pozo. Ante esto, uno de sus compañeros quiso sacarla, pero terminaron muriendo ambos por asfixia.
A las víctimas del fatal percance se les identificó como Francisco Javier Ocampo Colín, de 63 años, y Jazmín Chávez Santibáñez, de 34 años.
Datos no oficiales indican que la fémina era la contadora de la gasolinera.
Luego de más de cuatro horas de labores y con la ayuda de tanques de oxígeno, los elementos de Protección Civil lograron extraer los cadáveres y las autoridades ministeriales ordenaron su traslado a la morgue, para la práctica legal de la necropsia.