Nestora Salgado, senadora por Morena, adelantó que buscará presidir la Comisión de Derechos Humanos en el Senado y desde ahí trabajar en la liberación de unos 500 “presos políticos” que hay en Guerrero.
Indicó que el primer tema de su agenda es el de luchar por la libertad de unos 500 presos políticos que hay en Guerrero, pues consideró que “no es posible que la gente que lucha por la vida esté encarcelada porque no tienen recursos para comprar la justicia y por eso no los podemos dejar ahí”.
Afirmó además que buscarán fortalecer la ley 701 sobre derechos y cultura indígena, ya que “es una lucha que ha costado sangre, y no nos la regalaron esa ley porque el gobierno fue buena gente, hubo una lucha de la gente que murió”.
Durante una conferencia que ofreció este jueves en el auditorio de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) campus Chilpancingo, la excomandante de la policía comunitaria en Olinalá indicó que irá a Guerrero los fines de semana para sostener reuniones con quienes la busquen para ayudarlos a realizar gestiones o atender problemas sociales.
“Debía tener certeza para ser senadora, ayer tomé protesta y para mí Guerrero es muy importante. Quiero mucho a mi estado, quiero trabajar de la mano de ustedes y quisiera que nuestra vida cambie en todo el estado”.
Salgado afirmó que visitará “los rincones más apartados de Guerrero, porque de verdad quiero ser la voz de los pueblos originarios y su defensora de los derechos humanos”.
Entre los presos políticos y de conciencia, mencionó a los 25 integrantes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias- Policía Comunitaria(CRAC-PC), del poblado de Cacahuatepec, municipio de Acapulco, encabezados por Marco Antonio Suastegui, y del promotor de la CRAC en Tixtla, Gonzalo Molina González, que se encuentran en los ceresos de Acapulco y Chilpancingo respectivamente.
Confirmó que en el Senado, buscará encabezar la Comisión de Derechos Humanos con la intención es hacer un mapeo para integrar a los presos de conciencia, de luchadores sociales, como es el caso de la indígena Dominga “N”, originaria de Jalisco, quién está presa desde hace 15 años por diversos delitos, indicó.
Añadió que buscará que el campo florezca, pues Guerrero está abandonado a pesar de que ha habido recursos, pero que lamentablemente no le llegan al campesino y si llegan “son una miseria”, por lo que otro de sus compromisos es que sí les lleguen eso recursos.
Destacó que está la propuesta para la legalización de la amapola con fines medicinales, “pero no sabemos en qué va a cambiar esa situación, hay que buscar una forma de trabajar, el Estado mexicano debe pedir perdón por todo el daño que nos han hecho, nos han dividido”.
“Hay un equipo que se va a encargar de analizar la despenalización, queremos reconciliación en los pueblos, estamos en el mismo camino todos. Es una lucha que no voy a darla sola, las comunitarias surgieron por una necesidad”.