La alcaldesa de Acapulco Adela Román Ocampo expresó que no pensó que el problema de inseguridad estuviera “tan extremadamente grave” en el puerto, en donde la Policía Municipal estaba convertida en el brazo armado de la delincuencia organizada.
Ante alcaldes del estado y la presidenta de la Comisión de Seguridad de la Cámara de Diputados nacional, Juanita Guerra Mena, la alcaldesa expuso que la situación en Acapulco es dramática por el quebranto financiero, y porque los jóvenes y niños son carne de cañón e instrumento de los delincuentes.
Alertó que las escuelas están a punto de suspender clases porque la delincuencia ya amenazó que irán por el aguinaldo, y expresó que es doloroso ver que son cuidadas por la Marina y el Ejército. Dijo que ningún gobierno logrará nada si no se empodera la sociedad, pues no es con armas como se combatirá la delincuencia sino yendo al origen del problema.
“En Acapulco vamos a empoderar a la sociedad y a pedirle que nos apoye y se responsabilice, porque gobernar es corresponsabilidad; cuando la sociedad se empodera y fortalece es cuando hay buenos gobiernos”, argumentó.
Con información de Francisca Meza / Quadratin