La desesperación, falta de atención y resultados, así como el nulo apoyo de la empresa Estrella de Oro, llevó este día a que víctimas del accidente del 23 de octubre en la autopista del Sol, y sus familiares, protestaran en la central de autobuses de Chilpancingo.
Afuera de las instalaciones de la Estrella de Oro, del grupo ADO, víctimas del accidente, familiares y conocidos, así como familiares de las dos personas fallecidas, se concentraron en el acceso de salida de la terminal, para protestar ante la falta de respuestas.
El día de ayer, afuera del Hospital General Raymundo Abarca Alarcón, Lizbeth Peña, una de las víctimas del accidente, narró que su hijo, también víctima, perdió su brazo a consecuencia de las lesiones; ni ella ni el menor han recibido ningún tipo de apoyo por parte de la empresa Estrella de Oro.
De acuerdo con la afectada, así como la versión de otras personas lesionadas, el conductor viajaba en estado de ebriedad, lo que habría ocasionado que volcara el autobús que conducía, a la altura del Parque Industrial de Ocotito, en la autopista del Sol.
Continuando con las protestas, hoy frente a la Estrella de Oro, más manifestantes se reunieron para exigir una respuesta de la empresa, sin embargo ante la cerrazón, familiares y sobrevivientes, golpearon vidrios de la fachada y quitaron material de un par de trabajadores.
“El maldito chófer iba con la música que pareciera que estaba en el putero. Nos acercamos para decirle y no nos hizo caso”, reclamó la abuela de Eros, el menor de 11 años muerto en el accidente.
La exigencia, es que la empresa responda por todos los heridos que se encuentran en los diferentes hospitales de Chilpancingo, y cubra con los gastos funerarios de las dos víctimas menores de edad.
Aunado a la queja contra la empresa, algunas víctimas han visto en la Fiscalía General del Estado de Guerrero, una tendencia a no afectar a Estrella de Oro, tergiversando la investigación con el fin de que no afecte a la empresa.