La tarde de este miércoles, organizaciones sociales, padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala y maestros de la CETEG, llevaron a cabo una marcha en Chilpancingo para conmemorar el 50 aniversario de la muerte del guerrillero Genaro Vázquez Rojas.
El contingente partió de la estatua a Nicolás Bravo en la avenida Insurgentes y culminó con una manifestación en el Monumento a las Banderas, hecho que provocó caos vehicular en las principales vialidades de la ciudad.
Integrantes del Consejo de Pueblos y Comunidades Opositores a la presa la Parota (CECOP) exigieron la presentación con vida de Vicente Suástegui quien fue levantado por hombres armados en agosto de 2021 en Ciudad Renacimiento en el puerto de Acapulco.
En la concentración, Vidulfo Rósales reprochó que el pasado viernes fuerzas de seguridad estales y federales hayan impedido que los padres de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, tomaran la caseta de Palo Blanco en Chilpancingo para repartir volantes y pedir cooperación a los automovilistas.
Relató que el martes, los padres se dirigían a Acapulco y fueron hostigados por elementos de la Guardia Nacional, pues en la caseta La Venta los interceptaron y luego los siguieron hasta la zona urbana del puerto.
El abogado de los estudiantes, calificó las acciones contra el movimiento como actos de persecución e intimidación y un cambio de relación con el gobierno federal, esto porque han señalado al ejército de participar en los hechos de Iguala donde desaparecieron normalistas de Ayotzinapa.
“Pero ahora si nos preocupa que estas restricciones que se impusieron en Guerrero de no permitir que se realicen protestas en las casetas sea un el inicio de acciones de endurecimiento del gobierno federal contra el movimiento”.