Para acabar con el derroche de recursos públicos de las instituciones mediante el otorgamiento discrecional y opaco de remuneraciones, bonos, gratificaciones, recompensas, estímulos y otros rubros en favor de funcionarios, el diputado Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros presentó una iniciativa de Ley de Remuneraciones de los Servidores Públicos del Estado de Guerrero.
Al dar lectura a la propuesta, el diputado resaltó que se trata de una homologación constitucional que pone fin a la discrecionalidad, opacidad y desproporcionalidad de las remuneraciones de los servidores públicos de los tres niveles de gobierno, incluidos aquellos que forman parte de instituciones con autonomía constitucional.
Con esta Ley, refirió Sandoval Ballesteros, se establecen criterios de asignación, control y supervisión de estas, con la posibilidad de denuncia por los propios ciudadanos, a efecto de evitar retribuciones estratosféricas, sin menoscabar el derecho a recibir un salario digno y respetando las prestaciones de los trabajadores con menor capacidad económica.
El también presidente de la Junta de Coordinación Política manifestó que existe un escenario de hartazgo y desafección de los guerrerenses con la clase política, debido a que sus funcionarios públicos han caído en un ciclo vicioso, donde cada administración pública, de manera desmedida e injustificada, dispone de grandes cantidades de dinero por concepto de retribuciones.
Por lo anterior, dijo que la Ley de Remuneraciones de los Servidores Públicos del Estado acabará con los procedimientos arbitrarios en la designación de las remuneraciones de los funcionarios que en muchos casos conlleva a la conformación de un esquema de privilegios que se traduce en el derroche de recursos públicos en este rubro, y se deja de cubrir otras necesidades de los guerrerenses.