+A 10 años de su desaparición, la familia de Juan Carlos García denuncia pérdida de carpeta, destrucción de pruebas y nulos avances en la investigación
Este lunes se cumplieron diez años de la desaparición forzada de Juan Carlos García Hernández, mecánico de oficio, quien fue privado de su libertad el 5 de agosto de 2015, dentro de su taller ubicado en la colonia Amelitos de Chilpancingo, frente a su familia.
Cinco hombres lo subieron por la fuerza a un vehículo blanco. Desde entonces, su paradero sigue siendo desconocido.
En el marco del Día Internacional de la Desaparición Forzada, colectivas de personas desaparecidas realizaron una jornada de memoria y exigencia.
Por la mañana colocaron fotografías de Juan Carlos García Hernández en la fachada de la Fiscalía General del Estado de Guerrero, como símbolo de denuncia ante la falta de resultados. Más tarde, en la Alameda Central de Chilpancingo, realizaron un acto público en el memorial de personas desaparecidas.
Durante la jornada, familiares señalaron que a lo largo de una década han enfrentado omisión, negligencia y revictimización por parte de las autoridades. Denunciaron la pérdida de la carpeta de investigación, la destrucción de evidencia clave, así como la ausencia de avances sustanciales en la búsqueda ni en el esclarecimiento del caso.
El caso de Juan Carlos, es uno más entre miles, en el que responsabilidad de buscar ha recaído en las familias y colectivos, mientras las instituciones permanecen pasivas.
Acompañaron esta jornada diversos colectivos, entre ellos: Guerrero No + Desaparecidos, Memoria, Verdad y Justicia de Acapulco, Familias en Busca de sus Desaparecidos, Colectivo María Herrera, AFADEM, el colectivo Raúl Trujillo y familias provenientes de distintos municipios, quienes señalaron que esta acción forma parte de una unificación nacional que busca articular una exigencia colectiva frente a la inacción institucional.
Al término del pronunciamiento en la Alameda, el sacerdote Filiberto Velázquez, director del Centro de Derechos de las Víctimas de la Violencia Minerva Bello, ofreció una misa en honor a las personas desaparecidas.
Los colectivos reclamaron que el Estado no solo asuma su deber en la búsqueda, sino también en la reparación del daño, ya que muchas familias han quedado en el abandono, sin atención ni apoyo institucional.