Hay cuando menos cuatro mensajes políticos muy visibles en el arribo del ex gobernador de Guerrero, René Juárez Cisneros, a la dirigencia nacional del PRI: el candidato presidencial de ese partido José Antonio Meade, busca salir de su tercer lugar en las encuestas rescatando los apoyos de los grupos tradicionales del PRI –o los duros-; no parece dispuesto a declinar su candidatura a favor del panista Ricardo Anaya; se alejó del grupo de tecnócratas encabezados por el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, Peña Nieto y el propio ex presidente Carlos Salinas de Gortari; y confirma la ausencia y formación de nuevos liderazgos al interior del PRI, que tiene que recurrir a sus viejos cuadros para intentar retornar a una pelea presidencial que se anticipa perdida. Pero hay otros escenarios que no deben soslayarse.
RENÉ: FRACASO ANTICIPADO.- Hay un factor que preocupa hondamente en el PRI nacional: la efervescencia pro AMLO en la mayoría de los estados del sur del país. Y el fracaso en la operación en todos ellos, del ex dirigente nacional de ese partido, Enrique Ochoa Reza. Pero René Juárez, tiene sus propias rémoras:
1.- Cuando fue candidato a gobernador por el PRI en 1999, ofertó como principal divisa discursiva, haber ganado todas las elecciones en las que compitió. Lo hizo también en aquel proceso comicial. Seis años después de concluir su sexenio, se enfrentó a las urnas otra vez. Buscó la senaduría en la elección federal de 2012. Y perdió frente al avasallamiento electoral de López Obrador. Fue su primer y más importante descalabró. Pasó al Senado como primera minoría. De panzazo.
2.- En la elección de gobernador del 7 de junio de 2015, articuló una alianza con el grupo político de Manuel Añorve-Héctor Astudillo. Tomó cierta distancia de ellos cuando, el 6 de octubre de 2016, el presidente Peña Nieto, lo designó como subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación. Y por eso pudo manotear y meter algunos de sus cuadros políticos en la elección que viene.
3.- A Juárez Cisneros, se le ha relacionado con el grupo político del ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer. De hecho, trasciende en corrillos políticos que su arribo al CEN del PRI, estuvo ligado a la operación de muchos gobernadores tricolores que simpatizan y comulgan con la escuela autoritaria priísta. Y se cansaron de la ausencia de resultados de Enrique Ochoa, quien se plegó más a las cúpulas del partido tricolor y olvidó a las bases. Por eso Meade, nunca remontó el tercer lugar en las encuestas. Aunque el hartazgo social en realidad, se canalice contra Peña Nieto y el PRI.
4.- Para el ex gobernador guerrerense, irse como dirigente nacional del PRI, no representa una distinción política, sino una oportunidad virtualmente perdida en una coyuntura de crisis electoral y de credibilidad para ese partido. Tiene enfrente una tarea titánica. Su principal enemigo es el tiempo. De aquí al 20 de mayo –cuando se desarrolle el segundo debate presidencial- deberá entregar resultados diferentes a los de Ochoa Reza. Y ya no se trata nada más de Guerrero, sino de todo el país.
5.- En las cúpulas nacionales tricolores hay honda preocupación. Un solo hombre, aun con toda la estructura del voto corporativo oficial, con todo el dinero y las dádivas, difícilmente cambiará la percepción del descontento social masivo que se traduce en la baja del poder adquisitivo del salario. Y le pega directo a sus bolsillos. Para que Meade subiera en las encuestas, no necesita la operación de René Juárez. Sino maniobrar en cuando menos dos pistas urgentes: bajar a la mitad el precio de la gasolina. Y aumentar el salario mínimo a por lo menos 150 pesos diarios. Y no lo hará. René al igual que Ochoa Reza, está llamado a fracasar.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Después de anunciar su retiro de la política por un secuestro express que sufrió en mayo de 2014, el ex edil de Tlacotepec y ex diputado local priísta, Olaguer Hernández Flores, ya realiza campaña para arribar otra vez, como diputado local. Ahora por el distrito 19 de Zumpango. Ayer ocurrió una balacera en ese municipio. Trasciende que Olaguer, realizaba campaña electoral. ¿Sigue los mismos pasos de su paisano, el ex edil perredista Mario Alberto Chávez Carbajal?