+Delegado del Bienestar en Guerrero guarda silencio por el bloqueo de más de 12 horas por parte de pueblos indígenas tienen y afromexicanos
En un acto calificado como estrategia comunitaria, debido a la falta de atención por parte de las autoridades competentes, vecinos de once localidades damnificadas por el huracán Erick, retuvieron al presidente municipal de San Luis Acatlán, Adair Hernández.
De acuerdo con el vocero del Concejo Indígena y Popular del Estado de Guerrero – Emiliano Zapata (Cipog-EZ), no hubo confrontación y descartó que la retención del alcalde en el ayuntamiento de Marquelia, haya existido violencia o un acto de ilegalidad.
“No hubo violencia ni secuestro, convocamos a quedarse y dialogar” indicó el activista, luego de que a más de 12 horas del bloqueo en la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional, ninguna autoridad haya llegado a atender a las comunidades damnificadas.
Explicó que el día de ayer, tras la negativa de atención de los gobiernos estatal y federal, los manifestantes se trasladaron al ayuntamiento de Marquelia; el alcalde de San Luis Acatlán se presentó y fue recibido con la única demanda que era la atención para los damnificados de 11 localidades.
“La presencia del presidente no es un castigo, es una exigencia. La compete este problema porque es su municipio, porque representa a quienes hoy están enfrentando con dignidad”.
Durante este día, se ha buscado una respuesta por parte del delegado del Bienestar en Guerrero, Iván Hernández, de quien han pedido su presencia en la zona afectada, sin embargo hasta el momento se ha negado a pronunciarse por la protesta en la región de la Costa Chica.