+Denuncian que se han cortado las visitas familiares y no hay trabajo para las mujeres, por lo que no pueden comprar comida
Ante la falta de atención a distintas demandas, más de 30 mujeres privadas de la libertad en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chilpancingo, instalaron una huelga de hambre la mañana de este lunes.
En entrevista radiofónica, una de las mujeres explicó que de manera arbitraria las autoridades del Cereso han cortado las visitas familiares a los presos y tomado otras acciones, que atentan contra sus derechos.
Indicaron que no se trata de un motín, sino de una protesta por la cerrazón de la directiva del Cereso, ya que a pesar de ser lunes el encargado de despacho de la institución, no se encuentra en el lugar, pero tampoco ha atendido previamente el reclamo.
“No es un motín simplemente estamos pidiendo el derecho de audiencia con el encargado de despacho. Queremos que se nos regrese la visita conyugal dos veces por semana, que regresen las visitas normales los días sábados y domingos, que a las mujeres se les permita trabajar porque no hay dinero para poder comer”.
“De qué manera quieren quieren que comamos si no nos dejan trabajar. Somos más de 30 mujeres que vamos a entrar ahorita en huelga de hambre”, explicó Jackelin Pérez.
Al exterior del Cereso no se visibiliza ningún tipo de movilización, aunque las mujeres han afirmado que ya están en protesta al interior del Centro de Reinserción Social.