El aún obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza se pronunció en contra de la revocación de mandato del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y confió que no haya un intento de golpes de estado.
Entrevistado tras la misa dominical en la catedral de Chilapa, el recién nombrado Administrador Apostólico habló sobre el próximo proceso de Revocación de Mandato, propuesto por el presidente de México, y que se celebrará el 10 de abril.
Rangel Mendoza recordó que gobiernos de países como Venezuela, Nicaragua y Bolivia, extendieron sus mandatos “no de una manera democrática, sino con una serie de trampas”.
“Si gana (el tema de Revocación) puede decir: el pueblo me pide, y cuando terminen los seis años va a hacer otra Revocación de Mandato, que diga que el pueblo me está pidiendo”, señaló el prelado.
Agregó que el ejercicio democrático programado para el próximo 10 de abril, no le ha quedado claro, y reiteró su sospecha de que el titular del Poder Ejecutivo Federal podría preparar una especie de golpes de estado a la democracia de México.
“Yo por eso estoy en contra de la Revocación de Mandato”, indicó Salvador Rangel y añadió que se trata de una actividad que emana de recursos del pueblo, que podrían ser utilizados con mejores finalidades.