Como parte de la gira de actividades que durará seis días, el Papa Francisco arribó este lunes a Canadá, en donde se reunirá con pueblos autóctonos; pide perdón por los actos atroces de abusos, que provocó la muerte de más de 6 mil niños indígenas.
Como lo anunció anteriormente, el pontífice llegó al continente americano, para llevar a cabo actividades en Canadá, donde el año pasado fueron descubiertos los restos de niños en internados católicos.
Según las investigaciones, entre los años 1863 hasta 1998, un aproximado de 150 mil niños indígenas, fueron separados de sus familias en internados católicos, con el fin de borrar su herencia; en los centros, eran abusados físicamente y sicológicamente.
Fue el año pasado, cuando el hallazgo de los cuerpos de 250 niños en una fosa común, revivió el tema de los abusos de la iglesia católica, contra los pueblos originarios en aquel país.
El Papa Francisco, a su arribo, se encontró con una de las comunidades autóctonas en donde fueron sepultados algunos menores indígenas, y en sus tumbas pidió perdón por los hechos ocurridos el siglo pasado.
“Vengo entre ustedes para reunirme con los pueblos autóctonos. Espero que, con la gracia de Dios, mi peregrinación penitencial pueda contribuir al camino de reconciliación ya iniciado. Por favor, acompáñenme con la oración”, escribió antes de su llegada.
A su llegada, el Papa fue recibido con beneplácito por los pueblos en uno de los estadios de fútbol de aquel país. En los siguientes días, continuará su caminar por las zonas en donde se encontraban los internados en donde se halló evidencia de abusos por parte de maestros y directores, que llevaban hasta la muerte a los niños.