“Si no nos mata la pandemia, nos va a matar el hambre”, expresaron esta mañana comerciantes de Chilpancingo, que buscan apoyos de los gobiernos estatal y federal.
Antes de las 10 de la mañana, cientos de comerciantes de todo Chilpancingo, principalmente del centro de la ciudad, marcharon del monumento a Las Banderas hacia la Secretaría del Bienestar.
Los manifestantes, que pertenecen a la Unión de Comerciantes de Chilpancingo, solicitaron una audiencia con el gobernador de Guerrero y apoyos “pero sin interés”, del gobierno federal.
“Hasta el viernes teníamos aproximadamente unos 300 negocios cerrados, pero todos los días estamos actualizando las cifras”, indicó Ángel Mateos, representante de la organización.
Al llegar a la Secretaría del Bienestar, explicaron que las autoridades les informaron que sí había apoyos, pero estos serían con intereses, por lo que rechazaron la propuesta.
Entre otros temas, condenaron la intención del gobierno municipal de Chilpancingo, de hacer acatar las medidas sanitarias, a través de la fuerza pública.
“No somos delincuentes, somos comerciantes que nos gusta trabajar para sobrevivir, señaló el líder del movimiento.
El fin de semana pasado, el alcalde perredista de Chilpancingo, anunció que el día de hoy presentaría ante cabildo la propuesta de usar fuerza pública a quienes no acaten las medidas sanitarias por la fase III del coronavirus.