Mujeres de diez ejidos en la Sierra de Guerrero emprendieron campañas de reforestación en 30 hectáreas de terrenos, algunos sitios donde se plantaron árboles pinos, antes eran campos de siembra y cultivo de amapola, que ahora formaran parte de la biosfera protegiendo de la sierra Tecuani de los municipios Ajuchitlán del Progreso, San Miguel Totolapan, Coyuca de Catalán, Técpan y Atoyac de Álvarez.
Las zonas reforestadas son las que sufrieron incendios forestales este año, algunos provocados por presuntos integrantes de La Familia Michoacana que intenta desplazar a los habitantes de sus comunidades para apoderarse de sus recursos naturales.
La reforestación se realizó este fin de semana, actividad que fue organizada por el Colectivo de Mujeres de la Región Sierra y la Unión de Ejidos Forestales General Hermenegildo Galeana, quienes por méritos propios lograron gestionaron recursos ante la Red Mexicana de Organizaciones Campesinas Forestales (Red MOCAF) que a través del Fondo Territorial Mesoamericano (FTM) los apoyaron para reforestar 30 hectáreas de bosque en 10 ejidos de la Sierra de Guerrero y que beneficia a 11 comunidades.
El predio conocido como Puerto Los Pinedas perteneciente al ejido de El Balcón en la sierra de Coyuca de Catalán, un campo que por más de 40 años fue sitio de siembra y cultivo de amapola, fue el lugar donde se dio la inauguración de los trabajos.
Fueron más de 400 mujeres, entre niñas, jóvenes, adolescentes, adultas y ancianas que participaron en esta actividad cuyo principal objetivo es proteger el bosque, contrarrestar el cambio climático y buscar proyectos sustentables que les ayuden en su economía familiar
La actividad forma parte del programa de la Alianza Latinoamericana de Pueblos y Bosques que busca hacer frente al cambio climático en varios países del mundo.
En algunos puntos del predio Puerto los Pineda, aun se observaron enormes troncos de árboles sin hojas y con ramas negras ahumadas, que son los estragos que dejó el fuego que no pudieron controlar los habitantes durante los meses de abril y mayo.
Los diez ejidos donde comenzó la reforestación se ubican en lo alto de la Sierra de Guerrero, a casi siete horas de la capital del estado y abarcan las zonas de Tierra Caliente y Costa Grande.
Entre neblina y lluvia, decenas de personas participaron en estas actividades que se realizaron los días sábado y domingo; los hombres ayudaron a limpiar los campos y las mujeres realizaron los pozos para sembrar los pinos.
Los campesinos de la Sierra, aceptan y reconocen que por más de 40 años se dedicaron a la siembra de enervantes para sostener su economía pero con la caída del precio de la goma de opio y con el apoyo del programa SembrandoVida y otros programas que impulsa el ejido, hoy los campos de la sierra lucen con árboles frutales