Una roca grande como asiento y, sólo en aquellos que tiene la posibilidad, una caja de madera a modo de escritorio, todos bajo la sombra de árboles que son el único techo para 60 adolescentes de la localidad indígena de Ayahualtempa, en el municipio de José Joaquín de Herrera (Hueycantenango); exigen al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, instalaciones dignas para estudiar.
A mediodía de este miércoles, pobladores, padres de familia, alumnos y hasta maestros de la secundaria “Independencia de México”, mostraron a medios de comunicación la forma indigna en la que laboran desde el mes de septiembre.
La población donó un predio en donde actualmente estudian 60 adolescentes de los tres grados escolares de educación secundaria; el gobierno no ha dotado de servicios públicos, aulas, pizarrones, butacas, ni siquiera libros escolares completos para la comunidad estudiantil.
“Pedimos al presidente López Obrador la construcción de nuestra escuela secundaria, estamos muy involucrados con lo de la nueva escuela mexicana para una educación digna y hay lugares que no tienen ni una butaca ni un pizarrón, las condiciones no son óptimas para dar clases”.
“Los chicos buscaron piedras para poder sentarse, no tienen útiles escolares, tenemos niños huérfanos que no tienen quien los apoye en sus estudios. Nuestra petición va dirigida al presidente de la república porque él ha dicho que la educación es fundamental para este país”, indicó Nayeli Coctecón, docente de la secundaria.
Las clases en la escuela de nueva creación, iniciaron el pasado mes de septiembre, sin embargo debido a la situación en la que se encuentra el predio, se han registrado casos de insolación y dos picaduras de alacrán a menores, las cuales fueron atendidas rápidamente en el centro de salud de la localidad.
Padres de familia de la zona, lamentaron que por una parte el gobierno rechace contundentemente que los menores de edad se armen en contra de los grupos delictivos que tienen presencia en esta zona, pero no crean las condiciones para que los niños puedan seguir estudiando de manera digna.
En 2019, de manera insólita, la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), presentó en la localidad vecina de Alcozacán a 19 niños que fueron adiestrados para el uso de armas y formarían parte de la CRAC.