Hay cadáveres y sangre. Un sujeto utiliza un celular para documentar y amenazar el horror. Son instantes después de la emboscada que dejó policías muertos en Zihuatanejo, Guerrero.
Ocurrió el 17 de abril. Seis policías estatales murieron al ser emboscados por otros 15 civiles armados en la comunidad serrana de Las Mesillas, a tres horas de Zihuatanejo.
A las siete de la noche, autoridades guerrerenses recibieron el reporte sobre el ataque a la patrulla en la que viajaban los uniformados, quienes iban bajando de la comunidad El Camalote, y al pasar por Las Mesillas fueron emboscados.
En la zona había varios casquillos percutidos para fusil AR-15, AK- 47 y calibre .9 milímetros. Los uniformados brindaban medidas cautelares a un grupo de personas de la comunidad El Camalote, y en el cambio de turno regresaban a Zihuatanejo cuando fueron agredidos.
Tras la difusión masiva del video, el Gobierno de Guerrero, encabezado por el priista Héctor Astudillo Flores, amenazó a medios de todo el país.
“Cualquier material audio visual que atente contra los derechos de las víctimas, haga apología de la violencia y contribuya a la revictimización, es reprobable. No se tolerará su difusión por ningún medio de comunicación.
“El Gobierno del Estado ha solicitado la intervención de la Fiscalía General del Estado y de la Policía Cibernética para localizar el origen de su difusión, así mismo procederán acciones legales contra quienes divulguen contenidos de naturaleza violenta”, señaló autoridades en un comunicado.