Los ex servidor de Dios en la tierra, Alejo Zavala Castro y Salvador Rangel Mendoza, fueron duros críticos del anterior gobierno priista de Héctor Astudillo Flores, sus criticas fue en materia de seguridad y porque no se les recibía, al exgobernador le molestaban esas críticas, y les pedía que no se metieran a opinar en esos temas, por ello es que mantenía una férrea lucha en la Secretaría de Gobernación para que los callaran, es más, pidió que los sancionaran por expresar su preocupación por la inseguridad que se vivía en esos tiempos, los dos fueron duramente señalados por alzar las voces, pero no fueron atendidos como una forma de abonar a la paz que busca Guerrero.
Bueno, el día de ayer jueves, los periódicos como el Sur y Enfoque Informativo Guerrero Diario, a ocho columnas, destacaron la declaración que hiciera precisamente el Arzobispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González, en el sentido de manifestar que “Estamos Secuestrados y esclavizados por el crimen organizado” es lógico que esas declaraciones no están acordes con la realidad; ni es todo el Estado de Guerrero, pero sí se debe de reconocer que existen zonas, en donde el prelado católico pueda que tenga razón.
Pero quizás no la tenga tanto, si sabe que existe esa problemática, quien las provoca en donde viven, entonces que se presente ante las autoridades correspondientes y que se haga la denuncia, ¿verdad que no lo hará? O bien, que lleve a las corporaciones policiacas a esos lugares y señale directamente a quienes dice que tienen secuestrado a los pobladores.
Es fácil señalar, lo difícil es probar lo que se dice, quizás en el ánimo de abonar a la paz pues se le ocurrió expresar tan mala interpretación de la inseguridad que pasa el Estado de Guerrero. Quiero pensar que es eso y nada más.
Sin embargo el gobierno de Evelyn Salgado Pineda, está atendiendo ese tema, con todo el apoyo del gobierno federal, el compromiso es que nadie se sienta desprotegido en materia de seguridad, no es fácil garantizar esa seguridad, pero tampoco es imposible; aquí se combate ese problema con estrategia e inteligencia policial con el fin de que la sociedad no salga más perjudicada de lo que ya puede estar.
Bueno ante las declaraciones del prelado católico José de Jesús González, ayer se reunió con la mandataria estatal, en un ámbito de respeto y cordialidad recibió al representante de Dios, los temas tocados fueron con respecto a prioridad que el Estado debe de atender de manera urgente.
La mandataria le expresó que es una mandataria de territorio no de escritorio, y que este gobierno escucha todas las voces, con el fin de mejorar las condiciones de bienestar y seguridad al pueblo que gobierna, le expresó la titular del poder ejecutivo “escuchar a todos es mi compromiso, y ustedes tienen las puertas abiertas de este gobierno de la Cuarta Transformación, con la unidad y esfuerzo avanzamos en la ruta de la transformación”, terminó diciendo la gobernadora del estado.
Con eso demuestra que no son los tiempos de los gobiernos sordos de los priistas, como el de Astudillo Flores, que lejos de buscar el diálogo con los prelados católicos, los acusaba ante sus superiores. Este gobierno escucha a todos los actores que hacen vida activa en el Estado. La iglesia y sus prelados católicos ayudan a la gobernabilidad.
El primer paso para la paz es el dialogo, escuchar a los demás antes de señalar que no tienen la razón, se habla para ser escuchado, y es lo que la mandataria hace, dialogar con la iglesia no es malo, al contrario, ellos están en todos lados, su seguidores o fieles católicos creen en ellos, y por esa razón se les debe de escuchar.
Si todos supiéramos escuchar, dialogar, comunicar las ideas, entonces tendríamos otro tipo de sociedad, abonemos a la paz, desde el lugar en donde nos encontremos, Guerrero merece eso y mucho más. Nunca como antes los representantes de la Iglesia, son atendidos por el Estado, aunque sus voces no tienen la verdad absoluta, ayudan a la gobernabilidad en Guerrero.