En hechos distintos, dos hombres fueron ejecutados este domingo, uno en la región Tierra Caliente y otro más en la región Costa Grande de Guerrero.
El primer hecho se reportó alrededor de las 10:00 horas sobre una brecha conocida como “Camino Nuevo”, en dirección al río Balsas y la comunidad de Santo Domingo.
Al lugar arribaron elementos de las diferentes corporaciones policiacas que se encargaron de acordonar el perímetro, mientras que de las actuaciones se hacía cargo el personal ministerial.
La víctima se halló tendido boca abajo sobre un charco de agua y sangre, y a simple vista presentaba disparos de arma de fuego en la cabeza, accionados por arma de calibre 9 milímetros, de acuerdo con los casquillos localizados en la escena.
Se trató de un hombre de aproximados 35 años, de complexión regular y piel trigueña, quien vestía pantalón de mezclilla azul claro, playera gris y huaraches de cuero.
Las autoridades precisaron que la muerte se suscitó de madrugada, debido al estado de rigidez que tenía el cadáver.
Del levantamiento del cadáver se encargaron las autoridades de la Fiscalía Regional, que al término de sus trabajos ordenaron el traslado del cuerpo a sus instalaciones en Coyuca de Catalán
Ya al mediodía, personas que dijeron ser sus familiares lo identificaron como Abel Arroyo “N”, vecino de Tarétaro, del municipio de Coyuca de Catalán.
En otro hecho, este en la región Costa Grande, el cuerpo de un hombre torturado y ejecutado a balazos fue hallado al mediodía de este domingo a orillas del poblado de Coyuca de Benítez, de la región Costa Grande del estado.
El hallazgo se reportó hacia las 12:00 horas en un camino de terracería de la zona de huertas.
Elementos policiacos y personal de la Fiscalía Regional arribaron a la escena para hacerse cargo de las actuaciones correspondientes, durante las cuales advirtieron que la víctima fue sujeta de tortura.
El hombre tenías las manos amarradas hacia atrás, presentaba múltiples huellas de golpes y disparos de arma de fuego en la cabeza.
Los peritos localizaron al menos dos casquillos percutidos por arma de calibre 22.
Al final de las diligencias, el cadáver fue trasladado en calidad de desconocido a las instalaciones del Servicio Médico Forense de la ciudad de Acapulco, para la práctica legal de la necropsia.