Acapulco. — El magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) del Estado de Guerrero, Raymundo Casarrubias Vázquez, negó haber sido elegido al cargo por su amistad con el exgobernador, Ángel Aguirre Rivero; “le tiene gratitud y afecto”.
En conferencia de prensa, luego de asistir a la sesión de la asociación civil “Grupo ACÁ”, el magistrado presidente aceptó que obtuvo un cargo en el TSJ gracias a Aguirre Rivero, pero que este se dio con base en sus capacidades y trayectoria de 34 años en el Poder Judicial, y que no se debió a compromisos políticos o personales.
“No nos debemos compromisos, hay gratitud. Él me hizo secretario de la magistrada Adela Román Ocampo, si no lo tengo (el agradecimiento), sería un mal ser humano y lo hago con la gente que me ayuda”.
Casarrubias Vázquez, dijo que ha recorrido los diferentes espacios públicos de la institución, entre los más “humildes y más encumbrados. Ahora soy el presidente”.
Por otra parte, informó que durante su gestión en el TSJ, han sido sancionados siete servidores públicos y 10 fueron separados de sus cargos por actos de corrupción.
“Aquel servidor público que yo encuentre y esté metido en actos de corrupción, simplemente se va a ir”, sentenció.
Raymundo Casarrubias Vázquez, fue elegido en noviembre de 2021 como presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ).
Fue candidato del PRD a la alcaldía de Chilapa en 2008. Es cercano a los perredistas David Jiménez Rumbo y al exgobernador, Ángel Aguirre Rivero.