La Fiscalía General de Guanajuato confirmó el fallecimiento del niño indígena Javier Modesto Moreno, hijo de jornaleros guerrerenses que estaba desaparecido desde el 15 de mayo.
En un comunicado, la Fiscalía informó que los restos óseos hallados el 25 de mayo en una zona de sembradío, pertenecen a Javier.
“El día de hoy la familia, en conjunto de las organizaciones de la sociedad civil que la han acompañado en la búsqueda, participaron en el proceso de notificación de alto impacto emocional con perspectiva intercultural, diligencia en la que se dio a conocer que a través del trabajo interdisciplinario de los laboratorios de Servicios de Investigación Científica y de la Unidad de identificación de Personas Fallecidas se estableció que los restos óseos humanos localizados corresponden a Javier Modesto Moreno”, se lee en el comunicado.
La FGE de Guanajuato detalló que la causa de muerte del menor de 3 años, fue por atropellamiento y que falleció “por las lesiones ocasionadas”, aunque no informó nada sobre los 12 días que estuvo desaparecido.
Agregó que en cuanto se tengan avances en la investigación se darán a conocer.
Javier era hijo de Anselmo Modesto Martínez y Maura Moreno Agustín, originarios de Joya del Real, municipio de Cochoapa el Grande, en la Montaña de Guerrero.
Ambos trajaban en el corte de tomatillo en la comunidad del Jaguey, municipio de la Romita, Guanajuato.
Reportaron que Javier estaba sentado a unos 50 metros de donde sus padres realizaban su trabajo, al regresar a buscarlo ya no lo hallaron.
El Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, informó que los padres vieron pasar a una personas a bordo de una motoneta y “dos vehículos más”, por lo que sospechan que el menor fue sustraído por algunas de estas personas.
Organizaciones como la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) y la Organización de las Naciones Unidas México (ONU-México), se sumaron a las exigencias de búsqueda de Javier.