Tras un enfrentamiento del pasado 28 de noviembre, agentes de la Fiscalía General del Estado de Guerrero (FGE), abatieron a Ramiro alias “El Marino”, líder de una célula delictiva que operaba principalmente en el mercado central de Acapulco; también fue abatido Francisco “N”, principal colaborador de “El Marino”.
En un boletín difundido la tarde de este jueves, se informa que el mes pasado, agentes de la Fiscalía de Guerrero llevarían a cabo la detención de generadores de violencia, como parte de las acciones de inteligencia de la institución. Montaron un operativo en la colonia 20 de Noviembre, en donde fueron atacados con disparos de arma de fuego.
Los agentes repelieron la agresión y abatieron a Ramiro y Francisco, dos de los principales generadores de violencia, según la FGE. Además, a raíz del enfrentamiento se desplegó un operativo ya que ambos personajes eran señalados de delitos de secuestro y otros más.
La información proporcionada apunta que Ramiro “El Marino”, era líder de una célula delictiva que operaba en la central de abastos de Acapulco, denominada “Comandante 18”, al servicio del grupo delictivo de Los Rusos, conformada por remanentes del Cartel Independiente de Acapulco (CIDA).
“Mediante labores de investigación tanto en gabinete como en campo, el área de inteligencia tuvo conocimiento sobre la existencia de dicha célula delictiva, conformada por al menos 50 personas bajo el mando de Ramiro, mismas que se encuentran distribuidas en su mayoría por la zona del Mercado Central, La Cima, Carabalí y Primero de Mayo”.
La fiscalía ubica a “El Marino” como responsable de haber participado y ordenado el homicidio de 34 personas en lo que va del año, así como la desaparición de una decena de personas más.
Luego de abatir a los dos generadores de violencia, la FGE realizó actividades de seguridad en la colonia Providencia, dónde fueron detenidos Samir y Bernabé “N”, que formaban parte del grupo delictivo de El Comandante 18 y están acusadas del delito de extorsión.
“A esta agrupación delictiva se le atribuye principalmente el delito de extorsión en el mercado central, en la colonia La Cima, Carabalí, y Primero de Mayo; los cobros de cuota por descarga, derecho de piso y supuesta seguridad a comerciantes fijos y semifijos”.