Semanas atrás, familiares de la víctima de desaparición forzada acudieron a realizar actividades de búsqueda a Zihuatanejo, donde habría sido vista en centros nocturnos
Familiares y colectivos de desaparecidos, marcharon este sábado en la ciudad de Iguala, al cumplirse 13 años de la desaparición forzada de Ivette Melissa Flores, posible víctima de trata de personas; exigen atención del gobierno.
La tarde de este sábado, junto con el colectivo de Madres Igualtecas en busca de sus desaparecidos, familiares de Ivette Melissa llevaron a cabo una movilización por céntricas calles de Iguala, para exigir justicia por la joven quien, al momento de su desaparición tenía 19 años.
Al grito de “porque viva se la llevaron, viva la queremos”, familiares de Ivette recorrieron la avenida Guerrero y otras más; su caso es uno de los primeros documentados sobre la desaparición forzada en Iguala y dio pie al nacimiento de colectivos de desaparecidos, luego de la desaparición de los 43 de Ayotzinapa.
Durante las últimas semanas, el colectivo y familiares de Ivette, realizaron una extensa jornada de actividades en distintas regiones de Guerrero, principalmente en la Costa Grande, en busca de posibles indicios sobre su ubicación.
En días pasados en la ciudad de Zihuatanejo, realizaron actividades de volanteo cercanos a centros nocturnos donde, según información que recibieron desde años atrás, habría sido vista por última vez, posiblemente como víctima de trata de personas.
También en el Centro de Reinserción Social (Cereso), de la ciudad de La Unión, también en la Costa Grande, buscaron indicios de la joven quien, según lo relatado por su madre Sandra luz Román, fue desaparecida a manos del comandante de la Policía Ministerial, Humberto Velázquez.
El caso de Ivette ha traspasado la búsqueda estatal y fue gracias a eso que, desde hace un par de años, se sigue una pista sobre su posible paradero y movilidad en la región Costa Grande, entre los límites de Michoacán y Guerrero, donde estaría siendo forzada a trabajar, por lo que su familia no ha perdido las esperanzas de poder localizarla.
