En medio del azote de violencia que vive el municipio de Iguala, en la región Norte de Guerrero, el gobernador del estado, Héctor Astudillo Flores, reveló que los agentes que recibían capacitación desertaron y el municipio no cuenta con agentes policiacos propios.
En conferencia de prensa, el titular del Poder Ejecutivo, dio a conocer que por iniciativa del Subsecretario de Seguridad Pública Federal, Ricardo Mejía Berdeja, y el Subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, se pidió la salida de los policías de Iguala.
“La policía de Iguala no está operando, tiene varios meses que no funciona, quién está es la policía del estado junto con la Guardia Nacional y la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena), en una circunstancia verdaderamente compleja”.
“Fue todo un despropósito porque toda la policía que se fue a capacitar, todo se salieron de la capacitación y se regresaron a Iguala”, reveló Astudillo Flores.
Ha sido por esta situación, por la cual la presidencia municipal de Iguala, pidió el apoyo de las instituciones de seguridad estatal y federal, lo que hasta ahora no ha mermado la incidencia de violencia en ese municipio.
La policía municipal de Iguala, había sido señalada anteriormente de nexos con el narco, tras el ataque a los normalistas de Ayotzinapa el 26 y 27 de septiembre del 2014.
En esa ocasión, la policía fue desarmada y puesta a disposición de las autoridades federales, toda vez que se confirmó que el secretario de seguridad pública municipal, había dado órdenes de atacar a los estudiantes.